La Asociación Socastillo se encargó, hace dos años, en 2007, de organizar los actos de conmemoración del Milenio de la Batalla de Rubiales, acaecida en el año 1007, para lo que invitó al pueblo a diferentes investigadores, como Jaime Nuño, o el director del Archivo de la Real Chancillería de Valladolid, Eduardo Pedruelo. No obstante, casi toda la información ya se había publicado en la biblioteca de Aranda de Duero.
En esta batalla, librada en el monte Socastillo, próximo a San Martín de Rubiales, lucharon los habitantes del pueblo contra el ejército de Abd al-Malik al-Muzaffar, hijo de Almanzor. Tras nueve días de asedio musulmán, y de resistencia castellana, se sufrió el asedio a la fortaleza, que terminó con el ajusticiamiento de todos los varones, y con el reparto de las mujeres y los niños entre los soldados.
Esta conmemoración de las batallas de la línea del Duero ha resaltado las similares vicisitudes de ambas poblaciones, San Martín de Rubiales y Toro. Dos de los propósitos de la Asociación Socastillo son, por una parte, recopilar toda la documentación disponible de la Castilla Condal, y por otra parte, contar ese milenio de historia compartida, estableciendo al mismo tiempo relación «con cuanto personaje histórico o tema interesante pudiéramos tener», asegura Díez Valcabado.
Esta Asociación comenzó a buscar documentación sobre antepasados relacionados con San Martín de Rubiales, y al buscar en Real Chancillería de Valladolid descubrieron que tienen 146 causas. La más antigua es una del año 1598, referida a una probanza de nobleza de uno de sus antepasados, Juan de Valcabado, que estaba casado con Juliana de Monroy. Precisamente, para probar su nobleza debieron apoyarse en que eran descendientes de Antona García. Y aquí se establece el punto de unión con la ciudad de Toro.
«Para que nuestros antepasados en 1598 probasen su nobleza», explica Díez Valcabado, «fue necesario mandar unos comisionados de la Real Chancillería de Valladolid a Morales de Toro y a Toro, con lo que tiene que resultar interesantísimo ver quiénes, cómo, qué testimonio y qué forma de acta notarial registra el tipo de vida de la gente de Toro en 1598, con independencia de lo que es el heroísmo de Antona García». Por este motivo, la Asociación Socastillo se puso en contacto con el Ayuntamiento de Toro al encontrar estos documentos, y se ofreció a traérselos para que también estuvieran en la localidad toresana.
Antona García pertenecía al estado llano, y Juan de Monroy, su marido, era un noble de Toro. «Cuando esta ciudad estaba ocupada por los portugaleses, según dice el documento», Antona García trató de entregar la ciudad de Toro a los Reyes Católicos. Pero, lógicamente, la Beltraneja consideró este propósito como alta traición, así que la mandó degollar, «o dar garrote vil, no lo tengo muy claro», apunta Concha Díez, a la puerta de su casa, «en la reja que después de la Batalla de Toro, la reina mandó dorar». Después llegó el reconocimiento real, ya que ella había muerto antes de que los reyes entraran.
Este agradecimiento real se concretó mediante la concesión del privilegio de Valderas, «que se concedió a aquellos súbditos que habían hecho un gran sacrificio por la causa del rey», puntualiza Díez Valcabado. Este privilegio tiene todas sus confirmaciones hasta Felipe II. En este sentido, en el documento de agradecimiento real se puede leer: «por quanto Antona García, muger de Juan de Monroy y vezina desta ciudad de Toro, acatando la lealtad e fidelidad que nos devía e era tenida e obligada, ansí como a sus reyes e señores naturales, e el grande amor e buen zelo que tenía a nos e a nuestro servicio, trató con algunas personas de la dicha ciudad de Toro que nos ubiésemos entrada en ella por quanto nos la tenía ocupada el adversario de Portugal [...] el dicho adversaio mandó hazer cruel justicia pública della [....] e nos, aviendo el acatamiento e consideración como la dicha Antona García murió por nuestro servicio [...] es nuestra voluntad e merced que vosotros e cada uno de vos e dellos (Antona García, su marido y su descendencia) [...] gozedes de todas las franquezas e libertades e exempciones contenidas en el privilegio que los de Valderas tienen».
«Como tiene interés para Toro», explica, «hemos querido traer al Ayuntamiento la copia del documento de la Real Chancillería de Valladolid». Además, aclara que también van a entregar al Ayuntamiento una estructura de la obra, que tiene cuatro partes, para que sepan dónde encontrar cada uno de los asuntos interesantes, «como el pleito negativo de nuestro pariente, y después, para la probanza de nobleza, todo el estudio del pleito de Valderas y todo el estudio de la pertenencia de estos señores que incoaron esta causa de la pertenencia a la estirpe de Antona García». Y luego, podrán encontrar y confirmar los documentos de Antona García. Además, «estéticamente es precioso, es una de las joyas que tiene la Real Chancillería», asegura la vocal de la Asociación.
El privilegio de Antona García está confirmado hasta el siglo XVIII, «pero lo que nos atañe a nosotros y a nuestra relación con el Ayuntamiento de Toro es que tenemos pensado poner en valor este documento sobre el heroísmo de Antona García y sobre el heroísmo de los de Valderas», precisa Díez Valcabado. Sobre todo, lo que se proponen es recopilar una serie de documentos que hay de agradecimiento real, «y traer ese agradecimiento real de palabra y de obra al presente».
Se trata, en definitiva, de poner en valor el documento de Valderas, la transformación que tiene en la historia, cómo se aplica a los judíos, cómo el agradecimiento real lleva a aplicar este privilegio a casos puntuales cuando un súbdito ha hecho una defensa de la causa real, arriesgando, o perdiendo, como en el caso de Antona García, su vida.
Una localidad de la provincia de Burgos, en la comarca de la Ribera de Duero
San Martín de Rubiales es una localidad de la provincia de Burgos, en la comarca de la Ribera del Duero, situada a 15 kilómetros de Peñafiel y a 30 kilómetros de Aranda de Duero, a cuyo partido judicial pertenece. En esta localidad se creó, hace ya 20 años, la Asociación Socastillo, que reúne a 300 personas interesadas en dar a conocer a su pueblo cuál es su patrimonio histórico. El presidente de esta Asociación es José Melero, su tesorera es Teresa Martínez, su secretaria es Ana Roca, y su vocal de relaciones exteriores es Concha Díez Valcabado, reconocida pintora de la Ribera del Duero, siempe dispuesta a difundir los orígenes y la historia de Castilla y León, y que pertenece a diversas asociaciones.
La concejal de Cultura del Ayuntamiento de Toro, Mª Canto Marcos, ha asegurado que, después de conocer los documentos que esta Asociación ha dado a conocer a Toro, el Consistorio pretende pedir a la Real Chancillería de Valladolid un facsímil del libro y de los documentos que tratan sobre Antona García. Además, probablemente permanecerán en la Biblioteca Pública, en la Casa de Cultura, para que todos los ciudadanos que estén interesados en conocer estos documentos puedan tener acceso a ellos. Marcos recordó que en Toro se perdieron casi todos los documentos que existían, debido al incendio de las Casas Consistoriales en 1771, en el que se quemaron los archivos.
En esta batalla, librada en el monte Socastillo, próximo a San Martín de Rubiales, lucharon los habitantes del pueblo contra el ejército de Abd al-Malik al-Muzaffar, hijo de Almanzor. Tras nueve días de asedio musulmán, y de resistencia castellana, se sufrió el asedio a la fortaleza, que terminó con el ajusticiamiento de todos los varones, y con el reparto de las mujeres y los niños entre los soldados.
Esta conmemoración de las batallas de la línea del Duero ha resaltado las similares vicisitudes de ambas poblaciones, San Martín de Rubiales y Toro. Dos de los propósitos de la Asociación Socastillo son, por una parte, recopilar toda la documentación disponible de la Castilla Condal, y por otra parte, contar ese milenio de historia compartida, estableciendo al mismo tiempo relación «con cuanto personaje histórico o tema interesante pudiéramos tener», asegura Díez Valcabado.
Esta Asociación comenzó a buscar documentación sobre antepasados relacionados con San Martín de Rubiales, y al buscar en Real Chancillería de Valladolid descubrieron que tienen 146 causas. La más antigua es una del año 1598, referida a una probanza de nobleza de uno de sus antepasados, Juan de Valcabado, que estaba casado con Juliana de Monroy. Precisamente, para probar su nobleza debieron apoyarse en que eran descendientes de Antona García. Y aquí se establece el punto de unión con la ciudad de Toro.
«Para que nuestros antepasados en 1598 probasen su nobleza», explica Díez Valcabado, «fue necesario mandar unos comisionados de la Real Chancillería de Valladolid a Morales de Toro y a Toro, con lo que tiene que resultar interesantísimo ver quiénes, cómo, qué testimonio y qué forma de acta notarial registra el tipo de vida de la gente de Toro en 1598, con independencia de lo que es el heroísmo de Antona García». Por este motivo, la Asociación Socastillo se puso en contacto con el Ayuntamiento de Toro al encontrar estos documentos, y se ofreció a traérselos para que también estuvieran en la localidad toresana.
Antona García pertenecía al estado llano, y Juan de Monroy, su marido, era un noble de Toro. «Cuando esta ciudad estaba ocupada por los portugaleses, según dice el documento», Antona García trató de entregar la ciudad de Toro a los Reyes Católicos. Pero, lógicamente, la Beltraneja consideró este propósito como alta traición, así que la mandó degollar, «o dar garrote vil, no lo tengo muy claro», apunta Concha Díez, a la puerta de su casa, «en la reja que después de la Batalla de Toro, la reina mandó dorar». Después llegó el reconocimiento real, ya que ella había muerto antes de que los reyes entraran.
Este agradecimiento real se concretó mediante la concesión del privilegio de Valderas, «que se concedió a aquellos súbditos que habían hecho un gran sacrificio por la causa del rey», puntualiza Díez Valcabado. Este privilegio tiene todas sus confirmaciones hasta Felipe II. En este sentido, en el documento de agradecimiento real se puede leer: «por quanto Antona García, muger de Juan de Monroy y vezina desta ciudad de Toro, acatando la lealtad e fidelidad que nos devía e era tenida e obligada, ansí como a sus reyes e señores naturales, e el grande amor e buen zelo que tenía a nos e a nuestro servicio, trató con algunas personas de la dicha ciudad de Toro que nos ubiésemos entrada en ella por quanto nos la tenía ocupada el adversario de Portugal [...] el dicho adversaio mandó hazer cruel justicia pública della [....] e nos, aviendo el acatamiento e consideración como la dicha Antona García murió por nuestro servicio [...] es nuestra voluntad e merced que vosotros e cada uno de vos e dellos (Antona García, su marido y su descendencia) [...] gozedes de todas las franquezas e libertades e exempciones contenidas en el privilegio que los de Valderas tienen».
«Como tiene interés para Toro», explica, «hemos querido traer al Ayuntamiento la copia del documento de la Real Chancillería de Valladolid». Además, aclara que también van a entregar al Ayuntamiento una estructura de la obra, que tiene cuatro partes, para que sepan dónde encontrar cada uno de los asuntos interesantes, «como el pleito negativo de nuestro pariente, y después, para la probanza de nobleza, todo el estudio del pleito de Valderas y todo el estudio de la pertenencia de estos señores que incoaron esta causa de la pertenencia a la estirpe de Antona García». Y luego, podrán encontrar y confirmar los documentos de Antona García. Además, «estéticamente es precioso, es una de las joyas que tiene la Real Chancillería», asegura la vocal de la Asociación.
El privilegio de Antona García está confirmado hasta el siglo XVIII, «pero lo que nos atañe a nosotros y a nuestra relación con el Ayuntamiento de Toro es que tenemos pensado poner en valor este documento sobre el heroísmo de Antona García y sobre el heroísmo de los de Valderas», precisa Díez Valcabado. Sobre todo, lo que se proponen es recopilar una serie de documentos que hay de agradecimiento real, «y traer ese agradecimiento real de palabra y de obra al presente».
Se trata, en definitiva, de poner en valor el documento de Valderas, la transformación que tiene en la historia, cómo se aplica a los judíos, cómo el agradecimiento real lleva a aplicar este privilegio a casos puntuales cuando un súbdito ha hecho una defensa de la causa real, arriesgando, o perdiendo, como en el caso de Antona García, su vida.
Una localidad de la provincia de Burgos, en la comarca de la Ribera de Duero
San Martín de Rubiales es una localidad de la provincia de Burgos, en la comarca de la Ribera del Duero, situada a 15 kilómetros de Peñafiel y a 30 kilómetros de Aranda de Duero, a cuyo partido judicial pertenece. En esta localidad se creó, hace ya 20 años, la Asociación Socastillo, que reúne a 300 personas interesadas en dar a conocer a su pueblo cuál es su patrimonio histórico. El presidente de esta Asociación es José Melero, su tesorera es Teresa Martínez, su secretaria es Ana Roca, y su vocal de relaciones exteriores es Concha Díez Valcabado, reconocida pintora de la Ribera del Duero, siempe dispuesta a difundir los orígenes y la historia de Castilla y León, y que pertenece a diversas asociaciones.
La concejal de Cultura del Ayuntamiento de Toro, Mª Canto Marcos, ha asegurado que, después de conocer los documentos que esta Asociación ha dado a conocer a Toro, el Consistorio pretende pedir a la Real Chancillería de Valladolid un facsímil del libro y de los documentos que tratan sobre Antona García. Además, probablemente permanecerán en la Biblioteca Pública, en la Casa de Cultura, para que todos los ciudadanos que estén interesados en conocer estos documentos puedan tener acceso a ellos. Marcos recordó que en Toro se perdieron casi todos los documentos que existían, debido al incendio de las Casas Consistoriales en 1771, en el que se quemaron los archivos.
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Información recogida de la opinión de Zamora
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