Noticia: Pequeños hechos históricos

El rey Alfonso VIII agasajó a los vecinos de San Martín de Rubiales con su presencia para ceder el hospital.

La representación, realizada por actores de la localidad, rememora la cesión del hospital de Rubiales a las Madres Benedictinas, que tenían su convento en Tórtoles de Esgueva

La localidad ribereña de San Martín de Rubiales se vistió ayer de gala para recibir, 804 años después, al rey Alfonso VIII, apodado ‘El Bueno’, que acudió allí a petición de don Gonzalo Pérez de Torquemada, benefactor del convento de Madres Benedictinas de Tórtoles de Esgueva, del que su hermana Urraca era la priora. Estos personajes, junto con sus respectivos cortejos, cobraron vida en la iglesia de San Martín.

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